viernes, 16 de noviembre de 2012

Las claves (verdaderas) para adelgazar (y II)

He tardado un poco en redactar la segunda parte de las claves definitivas para adelgazar porque este es un blog que se basa en aquellas cosas que yo mismo compruebo en mi entorno o que voy estudiando o encontrando en la literatura científica.

 Hace un tiempo encontré un par principios que podrían ayudar a entender por qué no se adelgaza aunque se coma poco y me decidí a investigarlos. Ya tengo los resultados. También tengo que decir que todos los principios y claves son provisionales y perfectibles. Lo que expongo es lo mejor que hay por el momento. Espero que te sirva.

Claves definitivas para adelgazar: redacción definitiva (al actual nivel de conocimientos).

Las claves que definíamos en el primer post eran:

  • Controlar la TSH.
  • Evitar anticonceptivos hormonales dentro de lo posible.
  • No ralentizar la tiroides.

A estas claves deberíamos añadir un par de ellas más, una obvia pero necesaria y otra muy simple, pero de inmeso calado y tremendamente importante:

En primer lugar, la simple: haz ejercicio. Pero no demasiado. Basta con andar a buen ritmo un minimo de media hora y un máximo de una hora diaria. No es necesario más. Con ello ayudarás a activar tu metabolismo. También te será de utilidad el ejercicio con pesas tres veces por semana.

En segundo lugar, la importante: mantén bajo tu nivel de insulina. ¿Por qué? Simplificando, porque la insulina tiene como función, entre otras cosas, el que la glucosa que circula en la sangre se convierta en grasa dentro de los adipocitos, pero no solo eso: también impide, cuando sus niveles son altos, que esta grasa se convierta en glucosa, es decir, es bioquímicamente imposible adelgazar.

¿Qué se puede hacer para mantener unos niveles bajos de insulina en sangre?

  • Como primera providencia, sigue una dieta paleo, ya que ésta, por sí misma, te bajará los niveles de insulina.
  • Evita los alimentos, paleo o no, que elevan los niveles de insulina. En el post anterior vimos cómo evitar los alimentos muy insulinémicos.
  • Evita los edulcorantes. Los edulcorantes no engordan, pero tienen un problema: el cuerpo humano es muy inteligente y el cerebro, con sólo notar el sabor dulce del edulcorante ordena que se empiece a segregar insulina. Si tu problema no es adelgazar, si no que no quieres engordar, no pasa nada por tomarlos, pero si los tomas mientras intentas adelgazar tu adelgazamiento se verá ralentizado. Entre los alimentos que hay que evitar podemos señalar como los más habituales:
    • Sacarina, estevia y cualquier otro endulzante para leche, café, té etc.
    • Bebidas edulcoradas, tales como colas, refrescos, etc.
    • Lácteos edulcorados.
    • Helados, gelatinas y similares.
Si mantienes tu TSH por debajo de 2 mU/l, no ralentizas tu tiroides con alimentos bociógenos (como por ejemplo la soja), andas entre media hora y una hora diaria y procuras tener bajos los niveles de insulina mediante una dieta baja en carbohidratos y evitando alimentos insulogénicos y edulcorantes estarás en el camino no sólo de comenzar un proceso de adelgazamiento sostenido e importante, sino que además tu salud en general te lo agradecera, porque tener altos niveles de insulina, como veremos pronto, es muy poco recomendable.